Primera visita al dentista

Llevar por primera vez a tu hijo al dentista

Si tu hijo tiene entre 2 y 3 años, y ya tiene varios dientes de leche, es momento de llevarlo a un odontólogo.

Sabemos la «aventura» que implica la primera visita al dentista. Por eso te dejamos una serie de consejos para que su primera visita al dentista sea una experiencia positiva y recurrente.

Esta simple guía te ayudará a que tu hijo asista a su primera consulta odontológica sin problemas y no adquiera ese miedo infundado que muchos niños sufren.

Quítale el miedo

Gracias a la influencia de rumores, películas y programas de televisión, es normal que muchos niños al oír la palabra «odontólogo» piensen automáticamente en el sonido del taladro y se asusten sin tener una verdadera razón para hacerlo.

El mayor consejo que podemos darte, es que eduques a tu hijo de forma tal que no le tenga miedo a asistir a consulta odontológica. Explícale que es algo normal y que ir al odontólogo regularmente hará que sus dientes siempre estén sanos para así mostrar con seguridad la sonrisa tan bonita que tiene.

Sinceridad

En caso que a pesar de tus palabras de ánimos, aún le tenga temor a ir al odontólogo, te recomendamos que seas sincera. No le engañes, dile siempre la verdad: «Vamos al odontólogo, sólo te revisará los dientes, te hará una pequeña limpieza y no te dolerá».

Si te pregunta algo más difícil de responder, dile que el odontólogo es un amigo y que al llegar puede preguntarle a él todas las dudas que tenga.

Ser sincera es un factor muy importante, porque de no serlo, puedes perjudicar la confianza que hay entre tú y tu hijo, y al asistir a próximas consultas será peor.

Explícale todo

Además de ser sincera, explicarles todo lo que hará el odontólogo es una buena idea. Cuéntale tus experiencias, dile qué cosas pueden ver, sentir y oír. Háblale de los equipos médicos, los especialistas, los utensilios y reivindica el temible taladro.

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