Prevenir el sarro en los dientes

Además de antiestético, el sarro es la antesala de caries y enfermedades como gingivitis y periodontitis, por lo que es imprescindible eliminarlo y prevenir su reaparición para una buena salud bucodental.

El sarro es el endurecimiento de la acumulación de placa bacteriana alrededor de los dientes y debajo de las encías, cuya única prevención es la correcta y periódica higiene bucodental que evite la formación de placa.

Evitar y quitar el sarro en las piezas dentales

Si ya se ha formado sarro en los dientes, lo primero será eliminarlo a través de una limpieza dental profesional. A partir de ello, y siguiendo las recomendaciones del profesional, se debe mantener la higiene con el correcto cepillado diario y otros elementos.

Existen diferentes técnicas de cepillado y el profesional es quien puede indicar cuál es la más recomendada para cada caso. Sin embargo, en términos generales se deben seguir los siguientes pasos:

Cepillado: después de cada comida o, como mínimo, 2 veces al día en términos de no más de 12 horas. El cepillo o el cabezal debe renovarse cada 3 o 4 meses.

Cepillado de lengua y mejillas: en la formación de placa también influye la saliva, por lo que la limpieza integral de la boca es importante para su formación.

Hilo o seda dental: utilizarla correctamente (sin movimientos serrucho y con delicadeza hasta debajo de las encías) una vez al día o, como mínimo, 2 a 3 veces por semana.

Cepillos interdentales: si hay una separación considerable entre algunas piezas dentales o si se utilizan prótesis, existen pequeños cepillos que garantizan la limpieza de estas áreas.

Enjuague bucal: es una solución efectiva (y complementaria de las anteriores) para terminar de eliminar todas las bacterias.

De todos estos elementos existen presentaciones terapéuticas y cosméticas, el profesional médico podrá indicarle cuál es el más recomendado para su salud, por cuánto tiempo utilizarlo y con qué periodicidad.

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