Correcto uso del hilo dental después del cepillado
Desde hace décadas se recomienda el uso del hilo dental una vez al día o, como mínimo 2 a 3 veces por semana, pero su uso incorrecto puede ocasionar molestias que desalientan su utilización.
Muchas personas lo evitan, principalmente a raíz de la mala experiencia del sangrado de encías, porque que resulta incómodo o que demanda tiempo. Sin embargo, resulta necesario para el mantenimiento de una correcta higiene bucal evitando la acumulación de placa y la formación de sarro.
Técnicas para el uso de la seda dental
El hilo o seda dental es un complemento del cepillado que puede realizarse una vez al día. Incluso utilizándolo sólo unas veces por semana, si se lo utiliza correctamente, contribuye también a la salud de las encías.
- Se corta unos 40 cm de hilo, enrollando la punta en el dedo para sostenerlo, y se inserta con delicadeza entre las piezas dentales.
- Al ir deslizándolo hacia las encías y hasta por debajo de ellas, no se deben realizar movimientos de serrucho, solo deslizarlo evitando golpearlas.
El sangrado de encías puede producirse porque se está haciendo demasiada presión, el movimiento de forma incorrecta o porque las encías presentan sensibilidad.
Lo mejor para evitar el sangrado y las molestias al usar el hilo dental, es realizar una consulta al odontólogo. Es posible que se requiera una limpieza dental profesional antes de comenzar su uso o recomendaciones específicas después de un examen de su salud bucodental.
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